Marhaba bikhum, sidi Rajoy

Haciéndole un guiño a la historia del cine, más concretamente al genial Luis García Berlanga, me permito titular la entrada de hoy como la gran película española de los años 50, pero con el título adaptado a la realidad que estoy viviendo aquí, en el 2012-1433 en Tánger. La frase que da título a la entrada de hoy la podríamos traducir como Bienvenido señor Rajoy.

Y es que en el día de mañana viene a visitarnos, en su primera visita oficial al extranjero desde que fue nombrado, el Presidente del Gobierno de todos los españoles, tanto los que le votaron como los que no, pues al final los resultados de las elecciones afectan a todos por igual. Cumple con la tradición de algunos de sus antecesores en el cargo que optaron por Marruecos como el primer lugar del extranjero al que visitar.

El Presidente del Gobierno hará su primera visita oficial a Marruecos.

A lo mejor no nos llama la atención o nos parece casual la elección, pero me gustaría poner un poco de luz al respecto de este tema, por lo menos desde lo que yo veo y lo que yo entiendo. Como digo a mí no me parece casualidad esta elección por varios motivos, que ahora os comento, entre los que me gustaría destacar la proximidad vecinal, los intereses económicos y los acuerdos transfronterizos, además en esta ocasión también creo que puede influir la mala imagen pública que del señor Mariano Rajoy se tiene a este lado del Estrecho de Gibraltar.

La imagen del Presidente a este lado del Estrecho no es excesivamente buena.

Porque imagino que a mucha gente podrá resultarle curioso que la primera visita sea a Marruecos en lugar de a Estados Unidos o Alemania, países con los que España, a priori, tiene más proximidad cultural, económica y política. Pero es que Marruecos es un vecino muy interesante para España, tiene mucho interés en guardar unas buenas relaciones institucionales que favorezcan a los dos países.

Como decía antes la proximidad vecinal es uno de los motivos de que este sea el primer destino de Rajoy, la cercanía del país a España hace que sirva como puerta, como enlace entre España y el continente africano, en los dos sentidos por supuesto, tanto de salida de Europa como de entrada a ella. Mantener buenas relaciones vecinales con el reino alauita nos garantiza unas facilidades a la hora de la circulación de productos y bienes desde España al país vecino, y por ende a todo el continente.

Los intereses económicos que España tiene en Marruecos son muchos empezando por el espinoso, nunca mejor dicho, tema de la pesca en los caladeros marroquíes por parte de nuestra flota pesquera, continuando por la posibilidad de abrir un mercado para muchos de nuestros productos en el país y terminando con los intereses de muchas empresas que tienen una parte muy importante de sus negocios establecida en Marruecos: Atento, Roca, Delphi, Inditex… El señor Rajoy tiene la misión de velar porque todos esos temas lleguen a buen puerto.

El problema de la pesca es uno de los que seguro saldrá mañana en las conversaciones.

En cuanto al tema de los acuerdos transfronterizos pues no tengo nada nuevo que aportar, ya os hablé de esa realidad un tanto desconocida para muchos en la entrada “África empieza…”, los acuerdos que España, y la Unión Europea, tiene con Marruecos en el tema de la vigilancia de las fronteras hacen que las buenas relaciones con nuestros vecinos del sur sea fundamental para luchar contra el problema de la inmigración.

El problema de la inmigración es uno en el que Marruecos es un gran aliado.

Por lo que respecta al tema del lavado de imagen pues la verdad es que tengo que decir que seguramente muchos se sorprenderían al saber que el año pasado hubo manifestaciones en contra del Partido Popular español en Marruecos a las que asistió más gente que a las del movimiento popular del 20 de febrero. La verdad es que la política de inmigración que el Partido Popular defiende en algunas comunidades autónomas y algunos ayuntamientos no ayuda a cambiar esa imagen, así como tampoco lo hacen nombramientos como el del Director General de la Policía, Ignacio Cosidó, que afirmó hace unos meses en unos cursos de verano que “los inmigrantes musulmanes suponían un riesgo para nuestra democracia”. Duro trabajo el que le espera en este sentido al señor Rajoy.

Manifestación en Casablanca en contra del Partido Popular.

Por lo que a mí más me afecta, o más bien lo que a mí más me preocupa, de la visita del Presidente Rajoy a Rabat está el tema de la cooperación española que hay en Marruecos, en esta política de recortes en la que está metida el país desde la llegada e instauración de la crisis económica en España, me preocupa especialmente cómo van a quedar todos esos proyectos, como el del Hogar Lerchundi, que dependen tanto de la financiación económica del estado español, espero y deseo de todo corazón que no se vean afectados por esos recortes, que todo lo que hay puesto en marcha, todas esas buenas obras que ayudan a tanta gente necesitada, sigan en funcionamiento, continúen con su magnífica labor, espero que esta visita del señor Rajoy no sea como la de la película a la que me refería al principio, que no nos quedemos compuestos y sin financiación para los proyectos.

Espero que lo que salga de aquí mañana sea algo positivo.

En definitiva, mañana comienza una nueva etapa en las relaciones hispano-marroquíes, una página en blanco más en la que ir escribiendo el día a día de la convivencia entre estos dos países vecinos, unidos aquí por este puente virtual, con la esperanza de que sea una relación cordial y que ambos países avancen de la mano hacia un futuro más próspero.

Un fuerte abrazo para todos y ¡¡SED FELICES!!